“Esto se debe hacer y no olvidar que hoy la sangre de Jesús,
derramada por sus muchos mártires cristianos en varias partes del mundo, nos
interpela y nos empuja a la unidad. Para los perseguidores, nosotros no estamos
divididos, no somos luteranos, ortodoxos, evangélicos, católicos… no! ¡Somos
uno! ¡Para los perseguidores somos cristianos! No interesa nada más. Este es el
ecumenismo de la sangre que se vive hoy”. Así Papa Francisco se dirigió a los
miembros de la asociación carismática mundial Catholic Fraternity, recibidos en
ocasión de su 16ta Conferencia internacional. El Pontífice ha remarcado que la
uniformidad no es católica, no es cristiana. Que en cambio es necesario buscar
la unidad en la div ...
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